Carolina Vega| Martes 9 de enero de 2018

Depresión, adicciones, diabetes y obesidad son las principales enfermedades que sufren los hijos de migrantes mexicanos asentados en Estados Unidos, advirtió María de Lourdes Rosas López, investigadora de la facultad de Ciencias Políticas NYU – Upaep.

La segunda generación de migrantes mexicanos en Estados Unidos no tiene, en términos generales, buena salud. La escasez de recursos económicos y la falta de tiempo y cuidados por parte de unos padres que trabajan demasiado favorecen entre los menores un estilo de vida poco sano, marcado por alimentos poco nutritivos y ausencia de ejercicio físico.

Este estilo de vida provoca, señaló la académica en rueda de prensa, un deterioro de la salud de los hijos de los migrantes poblanos en Estados Unidos, tanto en el bienestar mental como físico.