11 enero, 2018 |

Los mexicanos pueden llegar a tener menos acceso a los servicios de salud en EEUU que estando en sus comunidades de origen.

Los inmigrantes mexicanos pierden considerablemente el acceso a los servicios de salud una vez que cruzan la frontera hacia Estados Unidos, y se mantienen así incluso si regresan a su país, según un estudio de salud pública realizado por especialistas de la Universidad Drexel, en Pensilvania.

El estudio, publicado en la revista especializada “Journal of Health Care for the Poor and Underserved”, analizó cómo la movilidad afecta la capacidad de las personas para obtener seguro médico y acceso al cuidado de la salud.

De acuerdo con la investigación, aproximadamente 84 por ciento de los inmigrantes mexicanos tenía seguro de salud antes de cruzar la frontera. Una vez en Estados Unidos, disminuyó a entre 25 a 50 por ciento.

La capacidad de obtener atención médica se redujo, además, de 78 por ciento de todos los adultos mexicanos a entre 47 y 60 por ciento una vez que los inmigrantes cruzaron la frontera.