• Por Karla Aguilera | El Sol de Irapuato |

En los últimos años, muchos migrantes guanajuatenses han preferido ya no regresar a trabajar a Estados Unidos; el entorno social y económico que se vive en aquel país se ha tornado complicado para ellos, por lo que algunos deciden probar suerte de nueva cuenta en su estado.

Antonio Cervantes, originario de la comunidad de San Cristóbal, ubicada en Irapuato, es uno de ellos. Él vivió durante 16 años en Estados Unidos, tiempo en que estuvo alejado de su esposa, a quien dejó con sus bisabuelos, para probar suerte en aquel país.

“Antes, la comunidad estaba muerta, no había nada, no había trabajo, no había escuelas y menos empresas, entonces uno se iba con esa idea a Estados Unidos, creyendo que íbamos a ir a barrer el dinero, pero nos equivocamos, es lo mismo”, aseguró Antonio, quien hace dos años decidió ya no regresar a Estados Unidos.

En Estados Unidos, Antonio Cervantes trabajó durante varios años en una compañía de pollos. Ahí operaba una máquina que diseccionaba los animales para empacar las piezas de pollo para venderlas en mercados. Después, trabajó en un restaurante de comida asiática, en donde los dueños eran otros migrantes coreanos; sus horas de trabajo eran largas y con poco tiempo de descanso.

“Vivir en Estados Unidos te llena de tensiones, es muy estresante porque se dedica uno a su trabajo y a su familia, uno tiene que estar al pendiente de mandar a la familia y a veces uno no gana bien, medio comes, te desvelas trabajando cuando tomas dos turnos o dos trabajos porque no alcanza, pagas renta, comida, transporte, teléfono, tienes que mantenerte allá y a la familia”, explicó Antonio.

Antonio Cervantes sufrió de discriminación, como la gran mayoría de los migrantes que van a trabajar a Estados Unidos, además que cada año tenían que quedarse en sus casas por las marchas que realizaban los integrantes de la organización Ku Klux Klan, para evitar ser violentados o provocarlos.

“Las leyes se enfocan más en los latinos, te señalan a ti primero que al ‘gringo’, pero hay gente muy buena y también hay quienes son racistas”.

Antonio Cervantes reconoció que Estados Unidos es un país donde las leyes y la autoridad realmente se respeta, pues todos se educan y aprenden su cultura para no tener problemas.

Antonio regresó a ver a su familia y decidió ya no regresar a Estados Unidos. Aprovechó el conocimiento que obtuvo en aquel país y decidió poner un negocio de comida china en la comunidad.

Antonio Cervantes contó que los jóvenes ahora piensan más para decidir irse, por la dificultad para pasar al país vecino, pues antes era más fácil y ahora hay muchos peligros; sin embargo, Guanajuato está teniendo una gran ventaja, pues hay más oportunidades laborales y más empresas que han llegado para que los jóvenes y adultos decidan quedarse en su país y no arriesguen su vida, pues aquí tienen a su familia.

Dan empleo a migrantes

Susana Guerra Vallejo, directora del Instituto Estatal de Atención al Migrante Guanajuatense y sus familias, dijo que durante 2017 fueron deportados nueve mil migrantes.

“Los hemos apoyado para que se integren en las empresas y con las capacidades que tienen, los ayudamos a que se certifiquen y están obteniendo mejores empleos. Por eso muchos ya no quieren regresar a Estados Unidos, pues en Guanajuato han encontrado empleo”.

Guillermo Romero Pacheco, secretario de Desarrollo Económico Sustentable de Guanajuato, dijo que de 2012 a la fecha se han instalado en el estado 224 empresas, de las cuales 71 han sido japonesas y han generado más de 23 mil empleos.

Orienta a migrantes en su regreso

El presidente de la Unión Campesina de Emigrantes Mexicanos (UCEM), Aarón Cabañas Marcial, comentó que 2017 fue un año incierto para los mexicanos por la política migratoria de Estados Unidos que ha asustado a la gente, porque muchos migrantes ahora dudan si podrán regresar o no a Estados Unidos, al país mexicano y de hacerlo, quién les garantiza el regreso a Estados Unidos.

“Es incierta su situación, porque el trato es muy diferente en la frontera, independientemente de que traigas tus documentos como residente, de todos modos hay recelo. Lo que nosotros les pedimos que se acerquen con nosotros para ofrecerles el apoyo que necesiten, pero sí hemos visto que ha habido una disminución de personas que se quieren ir y mejor se están quedando en su estado”, dijo el presidente de la UCEM.

Antonio Cervantes dice que no tiene la más mínima intención de regresar a Estados Unidos e incluso está orientando a jóvenes para que no arriesguen su vida por intentar cruzar a Estados Unidos.

“Es lo mismo: ciertamente allá se valora más y se paga mejor el trabajo, pero al final del día es lo mismo: las rentas son caras, hay que cuidarse del de enfrente, hay que trabajar para comer y si eso lo voy a hacer en otro lugar extraño, prefiero sufrirle, pero cerca de mi familia”.