| CIUDAD DE MÉXICO | 28 DE JULIO DE 2020 | POR JANNET LÓPEZ PONCE | FOTO : ARCHIVO |  

En el primer trimestre del año, 80 mil personas solicitaron refugio en México, lo que rebasa el total de trámites de todo el 2019 cuando se recibieron 70 mil 600, lo que representa un incremento de 34 por ciento en el mismo periodo del año pasado.

Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Migración y Población, detalló que en el 2013 se registraron 296 mil solicitudes, 29 mil 600 en 2018 y la cifra se elevó con el nuevo gobierno el año pasado a 70 mil 600. Pero actualmente, prevén que la pandemia por covid-19 incremente aún más estas cifras.

“Con la pandemia se ha mantenido el augurio. La estimación que tenemos es que el número de personas habrá de dispararse de manera significativa para lo cual, Comar se está preparando. Para ofrecer servicios sobre todo de educación y salud”, expuso durante una reunión virtual de la conmemoración de los 40 años de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).

En su participación, Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación, destacó que desde el siglo XX México decidió ser un país de puertas abiertas personas religiosas, académicas, luchadores sociales, artistas, políticos y muchos más que huyendo de regímenes opresores que encontraron en este país un nuevo comienzo. 

Por lo que el actual gobierno decidió retomar esa tradición de ofrecer asilo a quienes ven amenazados o vulnerados sus derechos humanos.

“En este contexto, no basta con ofrecer refugio a las personas que dejan atrás su vida y su país, sino que debemos asegurarnos que sus derechos sean cumplidos a cabalidad para que puedan tener una vida digna, por eso debemos trabajar para erradicar de una vez por todas la discriminación con la que todavía se trata a las personas refugiadas, debemos trabajar en un estado que abrigue con su manto a todas las personas que necesitan refugio y protección”, comentó.

La funcionaria reconoció que hace falta mucho por mejorar sobretodo en medio de la pandemia del covid-19 que sin duda, detonará aún más las solicitudes de refugio como lo explicó el subsecretario Alejandro Encinas.

“Vivimos tiempos muy difíciles, la pandemia del covid-19 nos ha traído un panorama insospechado pero a pesar de todas las adversidades debemos mantener a los derechos humanos como un pilar fundamental de la nueva normalidad, por eso celebro que la Comar siempre haya mantenido sus oficinas abiertas durante toda la crisis para garantizar sus servicios a quienes lo necesiten”.

Sánchez Cordero solicitó asistir a la reunión de refugiados que realizan las asociaciones de la sociedad civil para escuchar sus necesidades, cómo se han sentido e incorporado en el país y qué consideran que se debe mejorar. Y subrayó que pese a la contingencia, la Comar en ningún momento cerró sus puertas como parte de la política de no suspender labores en las áreas que se involucraban en garantizar y proteger derechos humanos.