Junio, 2017 | Redacción web/La Voz de Michoacán
Los Ángeles, California.Una familia se acerca a la frontera estadounidense. A pesar del clima extremo ha llegado hasta ahí con unas cuantas posesiones, un par de maletas, los niños en brazos. Buscan cruzar al otro país, pero en esta ocasión no es de México a Estados Unidos: esta familia está huyendo de EUA y busca llegar a Canadá.
En los últimos meses, el número de personas que cruzan de manera indocumentada la frontera entre EUA y Canadá para solicitar refugio o asilo político se ha incrementado de manera exponencial.
En la frontera del estado de Quebec, el paso más transitado para esta actividad, el número de personas arrestadas pasó de 254 en 2015, a mil 222 en 2016. Tan sólo en noviembre y diciembre del año pasado, tras el triunfo electoral de Donald Trump, el número de cruces fue de 578; en dos meses se registró más del doble del año previo. Esta tendencia ha continuado durante 2017: en enero se reportaron más de 450 casos, un nuevo récord mensual.
Republicano en agosto de 2016 —de una media de 30 solicitudes de asilo mensuales durante la primera mitad del año, la cifra pasó a 120 peticiones en septiembre y 180 en octubre—, y más tarde, como presidente electo. La plataforma electoral antiinmigrante del magnate, que se ha convertido en política de gobierno, parece haber encendido las alertas de quienes estaban en Estados Unidos provenientes de otro país y que se encontraban en proceso de asilo político o en vísperas de presentar su solicitud.
Otras provincias de Canadá experimentan el mismo fenómeno. Manitoba, donde se encuentra el segundo paso de inmigración ilegal más transitado, registró 430 cruces de solicitantes de asilo entre abril de 2016 y enero de 2017, casi 100 más que los 340 registrados durante todo el año fiscal 2015-16. British Columbia también presenta un alza: 652 personas durante 2016, el doble de la cifra registrada en el 2015.
De acuerdo con información de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA), publicada por la agencia Public Radio International, los principales países de origen de quienes cruzan ilegalmente para solicitar asilo son Siria, Sudán y Yemen, tres de las siete naciones incluidas en la orden ejecutiva llamada travel ban -conocida como muslim ban, por ser países con una mayoría religiosa musulmana-, firmada por Trump a finales de enero.
Jacqueline Roby, portavoz de CBSA, ha dicho que la agencia no especulará sobre los posibles motivos para esta migración, es fácil inferir que las medidas adoptadas por la nueva administración estadounidense podrían ser la razón por la cual las familias deciden cruzar grandes distancias para llegar al norte del país y buscar el ingreso a territorio canadiense, donde la política de refugio y asilo continúa siendo generosa: a las solicitudes de quienes cruzan ilegalmente se suman las más de 7 mil recibidas en puertos de entrada oficiales durante 2016, 63% más que en 2015.
Organizaciones de atención a inmigrantes estiman que a estas cifras oficiales podrían sumarse, además, cerca de 2 mil ingresos ilegales no registrados por las autoridades, por realizarse en áreas no patrulladas de la frontera.
Quienes cruzan de esta manera, en pleno invierno, estarían haciéndolo en las condiciones climáticas más adversas.