| MÉXICO | 15 DE JUNIO DE 2020 |FUENTE: INFOBAE | FOTO:AP/FERNANDO LLANO |

En los meses que van de enero a mayo del 2020, 17 cuerpos que perdieron la vida cruzando el río Bravo, en la frontera norte de México, fueron recuperados por agentes de los Grupos Beta del Instituto Nacional de Migración (INM).

Mientras que la migración hacia Estados Unidos ha disminuido por las restricciones fronterizas impuestas debido a la pandemia de COVID-19, continúan las mismas cifras del año pasado de cuerpos rescatados, de origen nacional y extranjero, que perdieron la vida intentando cruzar la frontera internacional.

Cuatro de las personas fallecidas eran de origen mexicano, dos de Guatemala, y uno de Honduras. El resto no contaba con documentos de identificación al momento de ser recuperado su cuerpo. Solamente uno de los 17, todos mayores de edad, fue registrado como mujer.

Mientras que los Grupos Beta rescataron a aproximadamente 1,000 personas migrantes en situación de riesgo, entre el 1 de enero y el 31 de mayo, nueve murieron ahogados en la entidad federativa de Coahuila y ocho en Tamaulipas.

En regiones desérticas y selváticas, los Grupos Beta del INM realizan recorridos y entregan sueros durante la tarde y la noche a personas en tránsito que estén en riesgo de morir por quedarse sin agua y alimentos o sufrir ataques de animales.

Existen 22 Grupos Beta del Instituto Nacional de Migración en nueve entidades federativas de México: Baja California, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Oaxaca, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, y Veracruz.

Este agosto cumplirán 30 años de existencia. Los agentes se han establecido por su “labor de protección y defensa de los derechos humanos de personas en condición de tránsito, efectuar acciones de orientación, rescate, salvamento, primeros auxilios y, en caso de alguna emergencia, traslado a hospitales”.

La Secretaría de Salud (SSa) reportó este viernes 12 de junio que los contagios por COVID-19 acumulados son 139,196. Además, desde el inicio de la epidemia, México ha sufrido 16,448 fatalidades.